Para lograr un pan auténtico,
no añadimos levaduras artificiales
para aumentar el tamaño y/o volumen. Apostamos por una
fermentación lenta y natural
que permite que el pan desarrolle su sabor característico y una textura única.
Este
proceso artesanal
le aporta a cada pieza una estructura firme, crujiente y un aroma irresistible, garantizando una experiencia de
sabor auténtico
en cada bocado.